Tipos de autoconsumo fotovoltaico

El autoconsumo fotovoltaico ha llegado a nuestros días como una manera de producir tu propia energía eléctrica para consumo personal de la vivienda. Se trata de un autoabastecimiento fotovoltaico solar donde la energía se consigue mediante placas solares.

Esta tipología de autoconsumo se encuentra en una inminente expansión por la creciente tendencia hacia una energía limpia y verde. En el caso de España, la producción es muy significativa debido a la ininterrumpida irradiación de energía durante todo el año.

El funcionamiento de estas instalaciones es sencillo. La energía solar es recogida mediante placas solares para ser convertida en energía eléctrica, posteriormente la corriente continua producida es transformada en una corriente alterna por el inversor solar.

Instalación fotovoltaica Tecnnia

Para comprender mejor su funcionamiento, resulta imprescindible conocer las tipologías de autoabastecimiento fotovoltaico existente. En Tecnnia nos encargamos de indicarte las distintas opciones dependiendo de la ubicación donde esté instalado el sistema o de si está conectado a la red eléctrica o no. Por tanto, podemos encontrar tres tipos de autoconsumo fotovoltaico:

  1. El autoconsumo fotovoltaico residencial: Puede ser conectado a la red, cuya instalación va a tener 2 conexiones, una al sistema eléctrico de la vivienda y otra a la red de distribución, propiedad de una compañía eléctrica y autoconsumo aislado, que supone la desconexión total de la red de distribución, por lo que requerirá de baterías o almacenamiento de energía para contar con energía eléctrica en la vivienda.
  2. El autoconsumo individual o compartido: Siendo el autoconsumo compartido la misma instalación para varias viviendas conectadas o una comunidad de vecinos y el autoconsumo individual el que abastece las viviendas unifamiliares. Las instalaciones de autoconsumo compartido son menos comunes, ya que contabilizar el consumo de cada vivienda resulta una tarea ardua. Por ello, aquellas comunidades de vecinos que cuentan con sistemas de autoconsumo son ubicados en zonas comunes como pasillos, garajes o motores para piscina.
  3. El autoconsumo industrial o para empresas: Esta forma de generación de energía no se limita solo a residencias. El autoconsumo industrial es una opción que consideran más y más empresas, consiguiendo grandes ahorros en sus facturas. Las instalaciones fotovoltaicas para empresas se diferencian de las residenciales en varios puntos como un tamaño superior, el consumo energético y las horas en las cuales se consume energía, que suele ser durante las horas diurnas, mientras que las residenciales se crean patrones de consumo a lo largo del día.

Por ello, en función de nuestras necesidades y características será necesario un tipo de autoconsumo fotovoltaico u otro. De tal manera, resultará imprescindible contar con un equipo profesional. Desde Tecnnia nos encargamos de evaluar la situación de cada cliente, indicar qué tipo de instalación necesita cada caso y realizar el diseño acorde a ello para garantizar a cada persona un gran ahorro en su factura y la generación de una energía limpia durante todo el año.

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